viernes, 5 de junio de 2009

“SOBRE LA MISOGINIA RADICAL”

Dr. Fernando Blanco Muiño – Dr. Diego Barovero
Convencionales Nacional por la Capital Federal


Seguramente producto del cansancio físico que le debe provocar haberse cargado sobre los hombros la mayor parte de la campaña del Acuerdo Cívico y Social, la doctora Elisa Carrió ha formulado una apreciación que aparece a todas luces injusta y hasta hiriente para con la Unión Cívica Radical, partido al cual estuvo afiliada, en cuyas filas militó muchos años y con el que acaba de construir un frente político electoral, calificándolo de “misógino y machista”.

Con cierta consternación y ante el silencio de las máximas autoridades partidarias nos preguntamos en qué partido, de no haber existido la Unión Cívica Radical , habrían desarrollado su fructífera actividad política y social a lo largo de casi 120 años mujeres de la talla de Elvira Rawson de Dellepiane, Regina Pacini de Alvear, María Roldán, Marisa Liceaga, Nélida Baigorria , María Teresa Merciadri de Morini, María Florentina Gómez Miranda, Margarita Malharro de Torres, Angela Sureda, Gabriela González Gass, por mencionar tan sólo a unas pocas que descollaron en la militancia partidaria y omitiendo quizá injustamente los nombres de cientos o miles de correligionarias que a lo ancho y largo del territorio nacional dieron y dan a diario lo mejor de sí mismas por la causa del radicalismo, que no es otra que la causa de la república, de la libertad, de la justicia, de la paz y de los derechos humanos.

Y sin ir más lejos, ¿acaso la doctora Carrió no fue exaltada por la UCR a la Convención Nacional Constituyente de 1994 y dos veces al Congreso como Diputada de la Nación (1995 y 1999) , antes que decidiera formar su propio partido?

Nos parece que antes de efectuar afirmaciones de estas características los hechos y circunstancias deben ser ponderadas adecuadamente y analizadas desde una óptica de mayor ecuanimidad y justicia.

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